top of page

Carta al Director: “Más vale pájaro en mano”


SEÑOR DIRECTOR:


En complemento a la columna de Pablo Allard y Jonathan Orrego publicada en su diario el día lunes y titulada como esta carta, quisiera hacer notar que en muchos barrios de Santiago estamos llenos de “pecados urbanos”, como la columna menciona; estas son extensas zonas de Santiago con potencial urbanizador y que se encuentran fuera del radar inmobiliario por poseer condiciones normativas que desincentivan la inversión.


Estos pecados son un gigantesco costo social que pagamos de forma invisible, al extender los costos de viaje de millones de santiaguinos y forzarlos a vivir más lejos de lo que quisieran. Todo, por no contar con adecuadas condiciones de asentamiento residencial en zonas céntricas de nuestra ciudad.


Nos hemos acostumbrado a observar zonas abandonadas en torno a estaciones de Metro, corredores de transporte público o grandes áreas verdes. La planificación urbana comunal responde muchas veces a presiones vecinales, que exigen mantener sus barrios como están, sin dar espacio a la densificación de ciudadanos que legítimamente quieren vivir en zonas bien equipadas de la ciudad.


Y por contrapartida, la ciudad termina hiperdensificándose en aquellas zonas en que la norma es permisiva, pero que quizás no posee adecuadas condiciones de asentamiento.


Así, vamos generando injusticias y desequilibrios en la forma urbana. Necesitamos con urgencia que la planificación urbana sea materia de gobernanza metropolitana, para fomentar un equilibrio en el uso del espacio físico, la inversión pública, y así terminar con planos reguladores comunales hechos a medida del vecino.


Rodrigo Aravena

Arquitecto y socio de AGS Visión Inmobiliaria


Publicada en Diario La Tercera

Comentarios


bottom of page